Definir el momento adecuado sobre el que actuar en la conservación del estado de la carretera es un asunto complejo. Hasta la fecha se han aplicado diferentes estrategias de conservación: actuando cuando el firme ya estaba deteriorado (estrategia curativa), estableciendo actuaciones periódicas de conservación con el objetivo de alargar la vida útil de la carretera (prevención) o aplicando diferentes estrategias intermedias. Si se es capaz de conocer la evolución del firme para fijar el momento más oportuno para actuar, se llegaría así a plantear el reto de aplicar la conservación predictiva en carreteras.