ESTE RETO YA NO ADMITE MÁS PROPUESTAS DE SOLUCIÓN.
Normalmente, el desarrollo de nuevos productos postcosecha requiere del análisis del residuo que queda en la envoltura de la fruta o verdura tratada. Cada vez que se conciben nuevas iniciativas (nuevos compuestos autorizados, prometedores o en fase de autorización, así como nuevos procesos de aplicación y limpieza) se necesita de la realización de análisis ad hoc y selectivos para el analito que se desea identificar. Generalmente, los laboratorios que prestan estos servicios suelen disponer de sistemas de análisis muy enfocados a determinar aquellos productos autorizados de los cuales se requiere análisis para cumplir la legislación. Sin embargo, cuando aparece una nueva sustancia a detectar, no son capaces de aportar soluciones. Lo mismo ocurre con muchos centros de investigación que, disponiendo de los equipos y las metodologías necesarios, no suelen dar soporte a estos proyectos de innovación de las empresas por su naturaleza variable y enfoque en investigación propia.
Es necesario, pues, desarrollar metodologías de ensayo de residuos de productos postcosecha novedosos en piel de frutas y verduras que sean flexibles, rápidos y de bajo coste, para que los fabricantes y usuarios de los mismos puedan determinar los residuos sobre la piel de la fruta y verdura aportando así más seguridad al cliente y a los consumidores. Por este motivo, se requiere encontrar un método para determinar qué cantidad del aditivo alimentario E-473 (Sucroésteres de ácidos grasos) queda retenido en las diferentes matrices, entendiendo como matriz la piel de las distintas frutas y verduras donde se aplica en forma de recubrimiento postcosecha.