Para alargar la vida útil de ciertos productos hortofrutícolas (ej: pepinos), estos se retractilan con un film plástico que lo protege de ataques de microorganismos, y atmósferas dañinas para el producto que acortan su vida útil en envíos de exportación.
Para la logística, estos productos retractilados se colocan a granel en cajas de cartón.
Recientemente, la tendencia de eliminación de plásticos especialmente en la UE, hace que se prohíban el uso de estos plásticos, desprotegiendo el producto y poniéndolo en riesgo en los envíos.
La problemática concreta de enviar productos sin film es:
– Las cajas de cartón se deterioran por la humedad que desprende el producto.
– Se produce una merma de calidad por oxidación del producto.